domingo, 12 de julio de 2009
NIÑOS DE LA CALLE
Las crisis económicas determinan de manera alarmante el crecimiento en el número de niñas y niños que viven y trabajan en la calle, que provienen de grupos familiares y de comunidades populares que no logran proporcionarles los satisfactores básicos y que –como resultado de una pobreza histórica–, no cuentan con herramientas fundamentales para la crianza y educación; por ello son comunes las historias de maltrato, desintegración y/o abandono.
Las políticas públicas han puesto poca atención a las condiciones que colocan a esta población infantil en riesgo de vivir y trabajar en la calle; de hecho, programas como el Progresa (hoy Oportunidades) aún no operan en las principales ciudades en donde se ha registrado la mayor presencia de este fenómeno social, ni han sido diseñados o adaptados para las características particulares que presenta.
La infraestructura comunitaria (como son los centros de servicio o las propias escuelas) es inalcanzable para las familias de niños en riesgo de salir a la calle o en muchos casos se encuentra subutilizada, sobre todo porque no se orienta a prevenir las condiciones de riesgo y porque prevalecen la desarticulación entre los programas y los enfoques asistencialistas o de corto plazo (determinados en buena medida por coyunturas políticas).
El uso político y publicitario que algunos actores públicos han hecho del tema de los niños de la calle no se corresponde con una inversión apropiada en infraestructura y financiamiento para apoyar y complementar las acciones que realizan los organismos no gubernamentales a quienes se les ha adjudicado la responsabilidad de atender a la población que ya vive y trabaja en la calle.
De manera frecuente autoridades públicas, sobre todo del ámbito local, realizan acciones que violan sus derechos y les colocan en una posiciónde mayor vulnerabilidad.
Un acontecimiento lamentable con esta población ha sido la promesa incumplida del presidente Vicente Fox quien en repetidos actos públicos ofreció atención prioritaria a los y las niñas de la calle; solicitando a las organizaciones una propuesta de política pública y firmando el 6 de marzo del 2001 un convenio público para implementar el programa nacional “De la calle a la vida”. Dicho programa se enfrentó a un aparato de estado obsoleto y asistencial que terminó por romper con las organizaciones, convirtiendo “De lacalle a la vida” en un programa de corte asistencial y estéril como política pública.
La falta de apoyo a metodologías apropiadas; a través de una normatividad; adecuada que permita obtener fondos públicos permanentes y de buena calidad; coloca serios obstáculos para lograr un mayor impacto en los esfuerzos para revertir o contener los severos daños que padece esta población (a su salud y a sus condiciones generales de vida por causa de violencia, explotación o discriminación) lo que lleva un mayor arraigo a la calle y la presencia de formas más complejas de vida callejera (jóvenes en la calle, madres adolescentes callejeras y generaciones nacidas en la calle).
domingo, 5 de julio de 2009
El Homosexual, ¿Nace o se Hace?
Mientras la Iglesia Católica acepta la homosexualidad pero condena como pecado la conducta homosexual, los científicos parecen estar más seguros de lo que no es, que de lo que es realmente la homosexualidad. ¿De dónde proviene? ¿A qué se debe? La homosexualidad genera debates que, en ocasiones, hace germinar la discriminación.
"La iglesia acepta la actividad sexual dentro del marco del matrimonio (religioso). Acepta el homosexualismo como uno de los misterios del dolor porque indiscutiblemente implica un gran dolor. Por eso la Iglesia rechaza el pecado que implica la actividad homosexual pero sabe que es necesario amar al pecador", dice el sacerdote Paco Legarra, de la Orden Agustino Recoleto y pastor de una iglesia cercana a Nueva York.De acuerdo con el padre Legarra, no todo está aclarado con respecto a la homosexualidad; pero es a la ciencia a quien corresponde investigarlo. Señala como uno de los misterios de esta condición casos en los que dos hermanos gemelos criados juntos y de misma manera, uno sea homosexal y el otro hererosexual. "¿Por qué?", se pregunta.El psiquiatra César Jardón, con amplia experiencia en el tema, asegura que para los mormones la homosexualidad es una enfermedad y solían someter a sus feligreses homosexuales a electrochoques, tratamiento consistente en aplicar corrientes eléctricas de corta duración al encéfalo, con el propósito de intentar curar algunas enfermedades mentales.El Dr. Jardón considera que la conducta homosexual puede tener una amplia gama de causas, entre ellas, el rechazo del niño a la personalidad o conducta del padre y a la identificación con la madre. No parece inclinado a aceptar como única alternativa la teoría genética, que es la más aceptada entre los grupos defensores de la comunidad homosexual.Sin embargo, las conductas homosexuales, según el especialista, se observan en una extensa variedadad de especies animales y lo ejemplifica con una pareja de pingüinos machos en el Parque Central de Nueva York, que estaban siempre juntos y rechazaban a las hembras.La homosexualidad ha existido desde tiempos inmemoriales. Según ciertas interpretaciones de la historia, fueron homosexuales, entre otros, Alejandro Magno, Rey de Macedonia y gran guerrero que conquistó extensos territorios; Ricardo Corazón de León, Rey de Inglaterra y también guerrero y conquistador, y Leonardo Da Vinci, aclamado pintor, autor de La Mona Lisa y la Virgen de las Rocas, un genio, inventor y visionario.La homosexualidad continúa presente en todos los países, sin importar razas, clases sociales o económicas. Hay personas homosexuales entre gente muy culta y los hay sin educación académica alguna; entre ateos y entre miembros de muy diversas religiones. Entrado ya el siglo XXI son más las interrogantes que las conclusiones sobre la homosexualidad.En 1973 la American Psychiatric Association (APA) eliminó la homosexualidad de la lista de desórdenes mentales y dos años más tarde lo hizo la American Psychological Association. De acuerdo con ambas instituciones, la homosexualidad no es una enfermedad, no se "contagia" ni los padres o las familias parecen tener responsabilidad en ello, ya que los grupos familiares en los que surge un homosexual (o más) son diversos. No hay respuestas concluyentes a la pregunta de qué puede hacer gay a una persona, sin embargo, en la mayoría de los seres humanos la orientación sexual, sea esta cual fuere, se evidencia a muy temprana edad."Recientemente se han descubierto considerables evidencias que sugieren que factores biológicos, genéticos o congénitos juegan un importante papel en la sexualidad humana, incluyendo la orientación hacia uno u otro sexo", señala la APA.Ismael Ferrer, de 38 años, se identifica como bisexual pero con preferencia homosexual, al igual que sus dos hermanos varones."Desde que tengo memoria me sentí siempre más atraido hacia el género masculino que hacia el femenino. Desde joven he tenido relaciones con mujeres; pero realmente las considero más bien accidentales, o quizás han sido intentos de parecer "normal", como se hacen llamar los heterosexuales. No sé a que se debe pero creo que nací así. No pienso que nadie escoja ser homosexual", dice Ferrer, cuyo aspecto no retrata su condición, aunque él no la niega."¿Quién busca ser rechazado por ser "distinto"?En la homosexualidad hay todo un abanico de personalidades. Entre los hombres se observa, desde el que exhibe actitud e incluso aspecto femenino, hasta aquellos tan varoniles que resulta difícil, a veces imposible, detectar su inclinación homosexual. Pueden preferir a las mujeres como amigas, o mostrar por ellas cierto desprecio o, quizás, celos.Entre las lesbianas se presenta un patrón similar: pueden tener grandes amigos hombres, o detestarlos. Su aspecto físico también suele ser variado: pueden lucir completamente femeninas, o vestir atuendos masculinos, y parecer hombres.Sara Gómez Vega ha vivido las dos etapas. Recuerda que comenzó a percatarse de su condidión desde que tenía ocho o nueve años.Al principio ya de su adolescencia escuchó a su madre comentar que prefrería ver a su hijo o a su hija "entre cuatro velas", que saber que cualquiera de ellos fuera homosexual. "He tenido mucha suerte de que ninguno de los dos lo es", cuenta Sara, de 50 años actualmente, que expresaba su madre. No sabía que tenía a una en la casa."En mi adolescencia y juventud, tuve que reprimirme. Usaba vestidos delante de mi madre. Me hice mi mundo propio, a mi manera, sin decírselo a nadie y me callaba la discriminación que sufría por parte de la gente que se daba cuenta. Nunca fui, ni voy, a discotecas gay, ni me reúno con gente gay tampoco. Tengo una compañera desde hace casi 20 años y nuestros amigos son gente heterosexual en su mayoría, aun después de que mis padres murieron. Creo que vivimos en una sociedad heterosexual y uno tiene que respetar el entorno en el cual vive", apunta Gómez Vega. Sin embargo, ya no oculta quien es. "En mi trabajo me respetan porque yo respeto a los demás; pero la gente no es boba: mi aspecto habla por mí. Por lo demás, el que quiera tratarme como soy, me trata. En cuanto a los demás ...nadie me paga los "biles". No sé por qué alguna gente discrimina: yo nací así. Nadie discrimina a alguien porque sea zurdo o porque tenga los ojos de este u otro color. Eso de que la gente "se hace gay" es una babosada. Nadie quiere ser distinto a los demás".En un reporte del 13 de octubre del 2006 el Museo de Historia Natural de Oslo, Noruega, en donde se inauguró una exhibición al respecto, se revela que la homosexualidad humana no puede ser vista como "no natural" ya que la conducta gay y lesbiana ha sido documentada entre girafas, pingüinos, cotorras y docenas de otras criaturas."Nosotros podemos tener opiniones en muchas cosas pero una cosa es clara: si la homosexualidad es palpable a través del reino animal, tampoco puede ser contra natura entre los humanos", señala la declaración.Geir Soeli, líder del programa de exhibición, dijo a la agencia Reuters: "La homosexualidad ha sido observada en más de 1,500 especies animales y está extensamente documentada en 500 de ellas".De acuerdo a Soeli, un grupo radical cristiano expresó que los organizadores de la exhibición -realizada en parte con fondos gubernamentales noruegos- "deberían arder en el infierno".De acuerdo con la Asociación Americana de Psicoterapia, aunque el rechazo continua existiendo a nivel individual y en grupos extremistas, a tal punto que puede generar violencia contra personas homosexuales, hoy en día se observa una mayor apertura y una comprensión algo más amplia."Probablemente esto se deba un interés más marcado en educar al público", dice la APA.De todas maneras, si ser gay resulta doloroso para la persona, y difícil para grupos religiosos, para los padres puede ser llegar a ser traumático.Lo fue al principio para Carlos y Gloria Arizmendi, católicos prácticos, miembros de varios grupos religiosos de su parroquia, y padres de cuatro hijos, dos hombres y dos mujeres."Nosotros no habíamos notado nada extraño en mi hija. Era como los otros tres: "normal". Ella había terminado la universidad. Tenía novio y él quería casarse ya pero un día pidió hablar conmigo y me dijo que había estado observando a su novia porque la notaba "rara". Ahora estaba seguro de que era lesbiana.Arizmenti cuenta que él quedó "en shock". "Yo no podía aceptar eso. De joven, mis amigos y yo perseguíamos a los homosexuales y, si podíamos, hasta los golpeabamos. Su propuesto yerno, aparentemente muy enamorado de la chica, pretendió incluso darle instrucciones al padre sobre lo que éste "tenía que hacer"."Mira, te agradezco que me hayas alertado; pero no me digas lo que tengo que hacer con mi hija", respondió. Y lo que hizo fue hablar con ella, preguntarle.Ella se lo confirmó. Le confesó que había tratado de ser como su hermana, como sus amigas. Pensó que teniendo novio se le pasarían sus sentimientos, pero no pudo. A ella le atraían las mujeres y rechazaba el contacto con los hombres."Mi hija es seria, formal, decente, cariñosa, buena hija. Y una profesional muy conocida. No fue fácil ni para mi mujer ni para mí, pero la aceptamos y lo mismo han hecho todos mis hijos. Todos ellos me respetan porque yo los apoyo como son", cuenta Arizmendi.Norma Ramírez cuenta que sospechó la inlinación homosexual de su hijo desde que éste tenía tres años de edad."No era afeminado, ni lo es hoy en día. Pero quizás las madres tenemos un sexto sentido. Yo notaba "algo" que no podía explicar. En aquel tiempo se decía que las madres apegadas a los hijos los hacen homosexuales. Traté de no serlo. Me sacrifiqué inútilmente. Observándolo, supe que mi hijo comenzó a percatarse en la adolescencia", narra Ramírez.De pronto, la crisis estalló con una violencia inusitada en aquel muchacho sereno, estudioso, inteligente, callado. Rompía cosas, se hería los brazos, contestaba con monosílabos. "Por primera y única vez en su vida, su padre llegó a propinarle una bofetada. Yo sabía lo que pasaba pero disimulaba ante mi esposo para evitar que sufriera. Conque sufriera yo era ya bastante", comenta Ramírez."El día que me dijo que tenía "ganas de matar o matarse", y "mandó a los curas y a Dios a paseo" (siempre estudió en escuelas católicas), señala Ramírez, decidió llevarlo a un psiquiatra. Este dictaminó que era necesario intenarlo temporalmente en un centro psiquiátrico. "El profesional se encolerizó cuando me negué rotundamente. 'Creo que su hijo es homosexual y no se acepta. Está pasando por una fuerte crisis. La hago a usted responsable de las acciones de el", dijo. "Me hago responsable, Dr.", respondí. Mi esposo, una tía y yo nos turnamos para vigilarlo durante dos días y sus noches. Busqué un psicoanalista capaz e inteligente". No solamente se aceptó, sino que cuando se graduó en la universidad y comenzó a trabajar, sus jefes, incluyendo el decano (católico) de la prestigiosa universidad a cuyo profesorado pertenece, y sus amigos, la mayoría de ellos profesionales heterosexuales, no solamente lo aceptan sino que lo respetan y lo quieren. No proclama que es gay pero tampoco lo niega. Incluso, se empeño en confesárselo a su padre a pesar de la oposición de la madre, quien quería evitarle ese dolor al padre. Este, al igual que ella, lo aceptan como es.El famoso informe Kinsey, que data de 1948 y todavía es el más influyente de su tipo, reveló que el 37% de los varones estadounidenses reconocía haber experimentado por lo menos un contacto sexual con otro varón. La mayor parte de los estudios al azar efectuados en Estados Unidos y en Europa Occidental estiman que alrededor del 8% de los hombres y las mujeres admiten haber tenido alguna experiencia homosexual, y que alrededor del 2% admiten su preferencia por experiencias exclusivamente homosexuales.El Informe Kinsey publicado por Alfred C. Kinsey hace casi 60 años ha sido la mayor revolución de la percepción de la sexualidad conocida hasta hoy, al entrevistar a más de 20.000 hombres y mujeres que respondían un cuestionario anónimo, con el cual se logró crear una base de datos que describían el comportamiento sexual en el ser humano, generando gran sorpresa los porcentajes de masturbación femenina, masculina, comienzo de la actividad sexual, homosexualidad, bisexualidad y otros comportamientos.El National Opinion Research Center ha reportado que aproximadamente el 0,7% de los hombres estadounidenses se consideran homosexuales, aunque se cree que la cifra es mucho mayor, debido al silencio de muchos para evitar la discriminación. El 17 de mayo de 1990, la Organización Mundial de la Salud (OMS) también excluyó la homosexualidad del Código Internacional de Enfermedades. Grupos defensores de los homosexuales escogieron esta fecha en 2005 para celebrar la Primera Jornada Mundial contra la Homofobia.
http://www.contactomagazine.com/articulos/homosexualidad.htm
jueves, 2 de julio de 2009
COLISEO ROMANO = CRUELDAD
En el Coliseo Romano se presentaban principalmente tres tipos de espectáculos: las carreras, las luchas de gladiadores y de animales, y el teatro. Las carreras no tenían, por su propia naturaleza, una especial significación moral, si bien por el modo en que se desarrollaban podían mostrar, en algunos casos, crueldad y menosprecio de la vida humana. Esto último, se acentúa sensiblemente en el caso de las luchas de gladiadores, y en el teatro que llevaba consigo una fuerte carga de inmoralidad.
Comencemos por decir que una gran parte de los criminales y de los presos de guerra eran destinados a estas luchas sanguinarias. Existían empresas especiales que proporcionaban partidas de gladiadores.
La lucha comenzaba con una marcha a través de la arena. Luego se iniciaba la lucha cuerpo a cuerpo, o grupos contra grupos. La lucha de gladiadores tenía un morbo atractivo por la sangre humana que se derramaba. Si uno de los contendientes caía gravemente herido, su vida quedaba al arbitrio del público asistente. Si cerrando el puño levantaba el dedo pulgar hacia arriba, era señal de clemencia. Volverlo hacia abajo significaba la muerte del desgraciado.
Con razón, el gran historiador alemán Mommsen, autor de una Historia de Roma, ha podido escribir que estas luchas de gladiadores eran "la manifestación y al mismo tiempo, el fomento de la más crasa desmoralización del mundo antiguo…, un espectáculo de caníbales…, la sombra más negra que pesa sobre Roma".
Se podría entender que con fieras era menos cruel, en apariencia cabría esa forma benévola de entender "las luchas de animales" o venationes. Pero la realidad era muy otra. Consistían en presentar animales feroces en luchas contra hombres, ya fueran gladiadores, o condenados a muerte, y más tarde, cristianos. El espectáculo era feroz y horripilante. El público romano era exigente y no se contentaba con cualesquiera fieras. Por eso, abundaban los leones y los tigres traídos de África. Antes de sacar las fieras a la arena se las mantenía hambrientas durante dos o tres semanas, con el fin de aumentar su voracidad.
Cuando se trataba de la ejecución, por este medio, de sentencias de muerte, el espectáculo revestía todos los caracteres de lo canibalesco y lo sanguinario. Así fueron sacrificados un buen número de inofensivos cristianos, ante la furia desatada del populacho.
MALTRATO ANIMAL
Nos pareció muy ineteresante este tema, porque cuantos de nosotros no hemos ido a algún circo o algún espectáculo de animales y nos divertimos viendo como los animalitos hacen diferentes cosas que nos hacen reir o que nos hacen decir que son super tiernos, o que estan muy bonitos o cosas por el estilo, pero lo que no sabemos es el trasfondo de toda esta situación, en estos videos se muestra como los domadores o los encargados de diferetes espectáculos tratan a los animales, es horrible ver como estos seres vivos indefensos son tratados de esta manera, es una injusticia, poruqe ellos no pueden hacer nada al respecto.
Leímos una nota donde se dice que los animales que participan en los circos, por lo mismo de que los circos van a diferentes ciudades éstos animales, tienen que pasar días y días dentro de un pequeño vagón, sin poder moverse libremente, soportnado climas extremos, tanto en invierno como en verano, sin poder comer y algunas veces sin tomar agua para que no se hagan pipi, soportando situaciones anti-higiénicas, porque si llegan a hacer del baño tiene que hacerse ahí en el mismo vagón y para evitar eso las personas no les dan de comer ni beber.
Leímos una nota donde se dice que los animales que participan en los circos, por lo mismo de que los circos van a diferentes ciudades éstos animales, tienen que pasar días y días dentro de un pequeño vagón, sin poder moverse libremente, soportnado climas extremos, tanto en invierno como en verano, sin poder comer y algunas veces sin tomar agua para que no se hagan pipi, soportando situaciones anti-higiénicas, porque si llegan a hacer del baño tiene que hacerse ahí en el mismo vagón y para evitar eso las personas no les dan de comer ni beber.
martes, 30 de junio de 2009
VIOLENCIA INTRAFAMILIAR
La violencia intrafamiliar es el maltrato físico, psicológico o de cualquier otro tipo de un miembro de la familia sobre otro.
Los tipos de actos considerados como parte de esta violencia son golpes o incidentes, insultos, manejo económico, amenazas, chantajes, control de actividades, abuso sexual, prohibición de trabajar fuera de casa, aislamiento, abandono afectivo, humillación y no respeto a opiniones.
Tanto hombres como mujeres tienen la culpa de la violencia intrafamiliar. Mientras que el hombre es más propenso a maltratar a la mujer físicamente y la mujer psicológicamente.
Creemos que lo maás importante es saber actuar, dado que en todos los países hay leyes que protegen al maltrato y castigan al agresor y es importante que se pida ayuda antes que la violecia se incremente y hasta se llegue a la muerte.
lunes, 29 de junio de 2009
ADICCIONES
Las adicciones, no respetan clases social, edad, sexo, nacionalidad, etc. Generalmente llegan cuando las personas se sienten solas o cuando tienen todo y ya no saben como sentierse mejor, cuando sufren alguna discriminación, cuando no tienen la suficiente atención por parte de sus familiares y amigos o por simple aceptación social.
Las adicciones empiezan cuando las personas consumen algún tipo de bebidas alcohólicas, fármacos, drogas naturales y sintéticas; y en el momento en el que al no consumirlas sienten cierta ansiedad y al no tenerlos al alcance hacen hasta lo imposible por conseguirlos aun así el dinero, llegan hasta robar a sus amigos y familiares y es ahí cuando empiezan a perderlos poco a poco.
Nosotras creemos que con las adicciones las personas no sólo se dañan físicamente sino también afectan su dignidad e integridad, valores esenciales en una persona; también pensamos que deberían enfocar su atención en cosas buenas y productivas y no cosas destructivas como son las drogas, bebidas dañinas, fármacos y en ocasiones hasta al mismo sexo y comida.
Al estar hablando sobre este tema y nuestra actual situación política es donde debemos cuestionarnos: ¿SE DEBEN LEGALIZAR LAS DROGAS EN NUESTRO PAÍS?; En nuestra opinión pensamos que no, ya que primero se debe educar a la población.
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